La primavera ya ha comenzado y con ella las temperaturas más agradables, las flores y los días más soleados. En este momento, comienzan a sentirse como alimentos más ligeros. A su vez, estos alimentos demandan los vinos más adecuados. ¿Cómo armonizar el vino perfecto?

Dejamos a continuación algunos consejos para celebrar la llegada de esta feliz y florida temporada con los vinos más adecuados.

Vinos blancos

Los vinos blancos son más ligeros, suaves y refrescantes, por lo que son ideales para consumir cuando las temperaturas empiezan a subir. Los alimentos más ligeros pueden ser pescados, ensaladas, mariscos y carnes blancas. Los vinos blancos son perfectos para acompañar estas comidas.

Vinos Rosados

Los vinos rosados ​​son muy buenos en las estaciones más cálidas, además de armonizar perfectamente con cualquier plato.

Conocidos por su tono rosado, los vinos rosados ​​presentan la delicadeza de los vinos blancos y algunas características de los tintos. Por tanto, cualquier amante del vino obtiene una experiencia maravillosa al degustar un buen vino rosado.

Habitualmente, su graduación alcohólica es baja y muy ligera, con un sabor muy dulce. Además de maridar con platos ligeros de carnes blancas o pescados, también maridan con carnes rojas.

Vinos tintos

Los rojos se asocian con alimentos más pesados, especialmente con carnes rojas. Sin embargo, ¿por qué no asociarlo con la primavera? Como las temperaturas aún no son tan altas, un vino tinto siempre es bienvenido. Si elige un vino tinto para acompañar su comida, prefiera uno más ligero, como los de la variedad Pinot Noir.

Vinos espumosos

Al igual que los vinos blancos, los vinos espumosos son ligeros, frescos, con buena acidez y se deben degustar fríos o helados. Lo ideal es maridar con entrantes, ensaladas, pescados y mariscos. También puede elegir vinos espumosos rosados.

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Imagen de belikt por Pixabay